La resonancia magnética corresponde a un examen no invasivo el cual no emite radiaciones ionizantes, basándose en la interacción de un campo magnético y ondas de radiofrecuencias con los átomos de hidrógeno del organismo. Esta técnica nos permite evidenciar una amplia gama de condiciones patológicas como cáncer, enfermedades vasculares, enfermedades del sistema nervioso y osteoarticular, entre otras.

La Resonancia Magnética es una técnica que nos permite ver el interior del cuerpo sin necesidad de realizar una intervención quirúrgica.

Los estudios realizados con esta práctica no son, de modo alguno invasivos, y se caracterizan por ser totalmente indoloros.

El resonador tiene la apariencia de un tubo corto y amplio. Una vez acostado en la camilla, será ingresado a un tubo (BORE) que corresponde al resonador magnético. Al iniciarse el estudio comenzará a escuchar ruidos, por lo que se le proveerá de protectores auditivos.

El resonador no emite radiación y por lo tanto se pueden repetir sin perjuicio para usted.

Es posible que, dependiendo del examen solicitado, sea necesaria la inyección de contraste endovenoso, llamado Gadolinio que sirve para lograr más detalles de ciertas partes del organismo y vasos sanguíneos.

Durante el examen, un tecnólogo especializado, estará en constante comunicación con usted. El tecnólogo tiene directo contacto visual con usted, y se le facilitará un botón de llamada para estar en constante comunicación.

Los exámenes de Resonancia Magnética demoran en promedio 20 a 40 minutos, dependiendo del número de secuencias de Imágenes que se obtienen del área anatómica en estudio. Si bien los estudios se pueden acortar, las imágenes que se obtienen intentan obtener el máximo de información disponible, con el número de secuencias que signifique la mejor calidad diagnóstica de los estudios.

La mayoría de secuencias que se obtienen en Resonancia Magnética tienen una duración de alrededor de 3 a 5 minutos. Cualquier movimiento que presente durante la adquisición de las imágenes puede causar imágenes borrosas y menor calidad de las mismas, que puede conducir a tener que repetir las secuencias, prolongando el tiempo del examen. Por esto es muy importante que permanezca quieto durante la realización del examen.

Si bien no se han demostrado efectos colaterales en pacientes embarazadas, el estudio de Resonancia Magnética no se recomienda realizar durante el primer trimestre del embarazo, excepto en casos en los cuales el beneficio del examen supere los potenciales riesgos.

La administración de medio de contraste durante el embarazo es aún más controversial. El medio de contraste atraviesa la placenta, involucrándose en el metabolismo del Feto. Aunque no se han demostrado efectos adversos en Humanos, si se han demostrado algunos efectos en experimentos en animales. Por esto, el medio de contraste no se debe usar durante el embarazo, excepto en casos en los cuales el beneficio de su administración supera los riesgos que se corren, como por ejemplo cuando se quiere confirmar la presencia de acretismo placentario, o alguna patología seria materna.

Traer exámenes anteriores si posee.
Debe presentarse con pelo seco, sin maquillarse, sin aros, sin cadenas.
No ingresar con billeteras, llaves, carteras, relojes, objetos de metal, tarjetas de crédito y teléfono celular, los que deberán quedar en el vestidor el cual queda con llave.
Traer ropa cómoda.
Si es portador de prótesis metálica, marcapasos, válvulas cardiacas, bombas de insulina, implantes auditivos, menciónelo antes de la realización del examen.
Si es operado de cerebro, corazón u oídos, menciónelo antes de que se le realice el examen.